En 1914, todos los campos de Camporrobles estaban dedicados mayoritariamente al cereal. Miguel Olmo y Lorenzo García optaron por plantarle cara al statu quo plantando, en sus apenas 8.000 metros cuadrados parcelas, los primeros viñedos de Bobal de la zona.
Tres décadas después, Manuel y Heraclio, hijos de aquellos que podríamos definir como visionarios, sumaron cinco hectáreas más, introduciendo una nueva variedad, Tempranillo.
Sería en las postrimerías del siglo pasado cuando sus hijos, Manuel Olmo y Lorenzo García, nietos de Miguel y Lorenzo, deciden dar un nuevo rumbo a la tradición agrícola familiar y, junto Pedro Calleja, apuestan por convertir ellos mismos sus cultivos en vino. Nacía Sierra Norte. Veinte años después hablamos de más de 400 hectáreas de cultivo vitivinícola y las denominaciones Cava, Utiel-Requena, Valencia, Alicante, Jumilla, más una IGP, Vinos de la Tierra de Castilla.
