La pasada semana se realizaba la presentación oficial de la temporada clochinera, acompañada como es preceptivo por sus mejores compañeros de mesa, los cavas valencianos. Un hecho que destacamos hoy, 12 de mayo, al ser este realmente el día oficial en que se inicia tradicionalmente la temporada, el día de la ‘Mare de Déu dels Innocents, Folls i Desamparats’ que precisamente hoy, cumple el centenario de su coronación, y se prolongará hasta el próximo 15 de agosto, día de la Verge de l’Assunció, o Verge d’agost.

El presidente de la Agrupación de Clochineros de Valencia y Sagunto, Jose Luis Peiró, destacó la calidad y sabor del molusco valenciano rico en vitaminas, omega 3, fósforo, magnesio, calcio, hierro y potasio.

Un vibalbo que, según el Departamento de Tecnología de los Alimentos de la Universidad Politécnica de Valencia, supera en aroma, sabor y jugosidad al gallego o procedente del Delta del Ebro, siendo diferenciado de inmediato respecto a estos por ser más pequeño que el mejillón, una tonalidad más suave y un sabor más intenso.

La producción busca superar nuevamente las 1.200 toneladas y que son criadas en las 22 bateas actuales situadas al abrigo de los puertos de Valencia y Sagunto, todas ellas bajo la Denominación de Origen, “Clochina de Valencia”.

Una tradición artesanal arraigada desde finales del siglo XIX, y originada desde la antigua ‘Unión Mejillonera del Puerto de Valencia’, responsable de la extensión de su la cría por toda la geografía española.